Shopping & Fucking de Mark Ravenhill. Dirigida por Mariano Stolkiner.
Una vez más, Mariano Stolkiner se sumerge en lo más turbio del teatro inglés de los últimos años. Después de dirigir las versiones locales de Cleansed y Amor de Fedra de Sarah Kane, esta vez optó por trabajar sobre la obra de uno de sus más estrictos contemporáneos, Shopping & Fucking de Mark Ravenhill. Las tres puestas se pueden pensar como un tríptico que revela la búsqueda y la sensibilidad de Stolkiner, propensa a las emociones más descarnadas y a la realidad más violenta.
Se sabe que Mark Ravenhill y Sarah Kane fueron contemporáneos. Ambos estrenaron en 1996 las dos obras que hicieron estallar el teatro británico; Ravenhill con Shopping & Fucking y Kane con Blasted (estrenada en Buenos Aires bajo la dirección de Leonor Manso como Aniquilados). Sin embargo, la contemporaneidad que los une trasciende su coincidencia espacio-temporal y debe ser entendida en los términos en que Roland Barthes hace uso del término “contemporáneo”: lo que comparten es una sensibilidad. Los personajes (y los escenarios) que presentan son posteriores a la revuelta y al desastre (no por nada en Blasted no paran de explotar las bombas), son el producto más bruto de la (pos) modernidad.
Shopping & Fucking trata sobre la red de relaciones que se establece entre una pareja de jóvenes, compuesta por Roby (Luciano Ricio) y Lulu (Eugenia Blanc), el hombre que los adopta, Mark (Daniel Toppino), el chico más joven del que éste se enamora, Gary (Lucas Lagré) y un extraño hombre que los observa de cerca y hace las veces de deus ex machina, Brian (Alfredo Urquiza). Ya desde el principio, al momento en que Roby y Lulu le piden a Mark que les cuente el cuento de cómo se encontraron, queda revelado que lo que caracteriza a estos personajes es la orfandad. Aparentemente, Mark simplemente los encuentra en un supermercado y se los compra a otro hombre que cumplió antes con su mismo rol. Todas las relaciones están vaciadas y funcionan solamente como medio de cambio. Es así como Lulu tiene que ofrecer su cuerpo a Brian a cambio de trabajo, al igual que Gary, que lo ofrece a cambio del príncipe azul que siempre está por venir a rescatarlo. El único que quiebra esta economía de intercambio es Roby cuando deviene dealer y rompe todas y cada una de las reglas básicas para llevar a cabo esa labor. Sin embargo, el problema no es sólo la orfandad de los personajes, sino que depositan todas sus esperanzas en Mark, que es probablemente el más desgraciado de todos. Todos necesitan algo más que los sustraiga de las tinieblas, aguardan por un salvador (en la forma de padre/amante/novio/tutor, etc.), pero el Godot que esperan es un drogadicto y sexópata en rehabilitación que no puede ayudarse ni a sí mismo.
La puesta de Mariano Stolkiner es fiel al espíritu de la obra, consiguiendo una adaptación que expone la crudeza de los personajes y de la trama. Cabe destacar el trabajo de Santiago Badillo en el diseño de la escenografía, compuesta principalmente por piezas de un plástico que refleja las relaciones que presenta la pieza, como también el de Fernando Sayago en la composición de la música, que da una tercera dimensión a una obra sobre lo superficial. Por ultimo, el trabajo de los actores es impecable y resulta interesante ver el intercambio que se produce entre dos generaciones distintas: por un lado, Daniel Toppino y Alfredo Urquiza, con largas trayectorias en sus haberes y, por el otro, Lucas Lagré, Luciano Ricio y Eugenia Blanc, integrantes de la joven guardia del teatro porteño independiente.
Ficha técnico artística
Autoría: Mark Ravenhill
Traducción: Rafael Spregelburd
Actúan: Eugenia Blanc, Lucas Lagré, Luciano Ricio, Daniel Toppino, Alfredo Urquiza
Actuación en video: Mathias Sassone, Mariano Stolkiner
Diseño de vestuario: Merlina Molina Castaño
Diseño de escenografía: Santiago Badillo
Diseño de espacio: Santiago Badillo
Diseño de luces: Julio López
Diseño sonoro: Fernando Sayago
Video: Santiago Badillo, Mariano Stolkiner
Música original: Fernando Sayago
Fotografía: Guido Piotrkowski
Diseño gráfico: Santiago Badillo
Asistencia de dirección: Julieta Cajg, Mathias Sassone
Prensa: Daniel Franco, Paula Simkin
Producción ejecutiva: Bárbara Rapoport
Dirección: Mariano Stolkiner
EL EXTRANJERO
Valentín Gómez 3378
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Reservas: 48627400
Web: http://www.elextranjeroteatro.com
Entrada: $ 60,00 / $ 40,00 - Viernes - 21:00 hs - Del 20/04/2012 al 29/06/2012
x Martín Villagarcía
Una vez más, Mariano Stolkiner se sumerge en lo más turbio del teatro inglés de los últimos años. Después de dirigir las versiones locales de Cleansed y Amor de Fedra de Sarah Kane, esta vez optó por trabajar sobre la obra de uno de sus más estrictos contemporáneos, Shopping & Fucking de Mark Ravenhill. Las tres puestas se pueden pensar como un tríptico que revela la búsqueda y la sensibilidad de Stolkiner, propensa a las emociones más descarnadas y a la realidad más violenta.
Se sabe que Mark Ravenhill y Sarah Kane fueron contemporáneos. Ambos estrenaron en 1996 las dos obras que hicieron estallar el teatro británico; Ravenhill con Shopping & Fucking y Kane con Blasted (estrenada en Buenos Aires bajo la dirección de Leonor Manso como Aniquilados). Sin embargo, la contemporaneidad que los une trasciende su coincidencia espacio-temporal y debe ser entendida en los términos en que Roland Barthes hace uso del término “contemporáneo”: lo que comparten es una sensibilidad. Los personajes (y los escenarios) que presentan son posteriores a la revuelta y al desastre (no por nada en Blasted no paran de explotar las bombas), son el producto más bruto de la (pos) modernidad.
Shopping & Fucking trata sobre la red de relaciones que se establece entre una pareja de jóvenes, compuesta por Roby (Luciano Ricio) y Lulu (Eugenia Blanc), el hombre que los adopta, Mark (Daniel Toppino), el chico más joven del que éste se enamora, Gary (Lucas Lagré) y un extraño hombre que los observa de cerca y hace las veces de deus ex machina, Brian (Alfredo Urquiza). Ya desde el principio, al momento en que Roby y Lulu le piden a Mark que les cuente el cuento de cómo se encontraron, queda revelado que lo que caracteriza a estos personajes es la orfandad. Aparentemente, Mark simplemente los encuentra en un supermercado y se los compra a otro hombre que cumplió antes con su mismo rol. Todas las relaciones están vaciadas y funcionan solamente como medio de cambio. Es así como Lulu tiene que ofrecer su cuerpo a Brian a cambio de trabajo, al igual que Gary, que lo ofrece a cambio del príncipe azul que siempre está por venir a rescatarlo. El único que quiebra esta economía de intercambio es Roby cuando deviene dealer y rompe todas y cada una de las reglas básicas para llevar a cabo esa labor. Sin embargo, el problema no es sólo la orfandad de los personajes, sino que depositan todas sus esperanzas en Mark, que es probablemente el más desgraciado de todos. Todos necesitan algo más que los sustraiga de las tinieblas, aguardan por un salvador (en la forma de padre/amante/novio/tutor, etc.), pero el Godot que esperan es un drogadicto y sexópata en rehabilitación que no puede ayudarse ni a sí mismo.
La puesta de Mariano Stolkiner es fiel al espíritu de la obra, consiguiendo una adaptación que expone la crudeza de los personajes y de la trama. Cabe destacar el trabajo de Santiago Badillo en el diseño de la escenografía, compuesta principalmente por piezas de un plástico que refleja las relaciones que presenta la pieza, como también el de Fernando Sayago en la composición de la música, que da una tercera dimensión a una obra sobre lo superficial. Por ultimo, el trabajo de los actores es impecable y resulta interesante ver el intercambio que se produce entre dos generaciones distintas: por un lado, Daniel Toppino y Alfredo Urquiza, con largas trayectorias en sus haberes y, por el otro, Lucas Lagré, Luciano Ricio y Eugenia Blanc, integrantes de la joven guardia del teatro porteño independiente.
Ficha técnico artística
Autoría: Mark Ravenhill
Traducción: Rafael Spregelburd
Actúan: Eugenia Blanc, Lucas Lagré, Luciano Ricio, Daniel Toppino, Alfredo Urquiza
Actuación en video: Mathias Sassone, Mariano Stolkiner
Diseño de vestuario: Merlina Molina Castaño
Diseño de escenografía: Santiago Badillo
Diseño de espacio: Santiago Badillo
Diseño de luces: Julio López
Diseño sonoro: Fernando Sayago
Video: Santiago Badillo, Mariano Stolkiner
Música original: Fernando Sayago
Fotografía: Guido Piotrkowski
Diseño gráfico: Santiago Badillo
Asistencia de dirección: Julieta Cajg, Mathias Sassone
Prensa: Daniel Franco, Paula Simkin
Producción ejecutiva: Bárbara Rapoport
Dirección: Mariano Stolkiner
EL EXTRANJERO
Valentín Gómez 3378
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Reservas: 48627400
Web: http://www.elextranjeroteatro.com
Entrada: $ 60,00 / $ 40,00 - Viernes - 21:00 hs - Del 20/04/2012 al 29/06/2012